Si un humano tiene un hijo índigo ha de tener cuidado, porque:
• Los Índigo son abiertos y honestos y requieren que los demás sean honestos y abiertos con ellos.
• Necesita permanentemente nuevos desafíos y nuevos límites. Alimente sus cerebros y manténgalos ocupados, pero no en distracciones banales, sino siguiendo el hilo de su crecimiento y desarrollo, que es muy
rápido. Tenga mucho cuidado en no frenarlos en su proceso de crecimiento.
• El mensaje dado y transmitido por los adultos debe ser más
placentero que doloroso, y más basado en el amor que en el miedo.
• Evite malentendidos simplemente dando explicaciones.
• No pierda la paciencia con su niño.
• Evite dar órdenes, en vez de usar órdenes verbales, use el
tacto para llamar su atención. Ellos son muy sensibles al contacto (toque en el
hombro, apretón de manos, abrazo, etc.)
• Mantenga su palabra; negocie en cada situación.
• Cuando considere que debe reprimirlo dígalo sincera y abiertamente; no esconda nada ni use lenguaje ofensivo.
• Deje que sus emociones le muestren amor, y no odio.
• Discuta la situación generadora de la reprimenda después
de ésta.
• Después de todo, siempre acérquesele al niño y vea si hubo
un aprendizaje y crecimiento tras la reprimenda.
Importante: Recuerde que el castigo no funcionará con estos
niños. El castigo es diferente de la reprimenda. El castigo está basado en la
culpa, mientras que la reprimenda se basa en un crecimiento o mejoramiento.
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